jueves, agosto 17, 2006

Tengo ganas de llamarle y me estoy comiendo las uñas (por no decir otra cosa) por no hacerlo y, además, el comerme las uñas me recuerda a él, a su: no te comas las uñas, te doy un beso a cambio.

Debo ser imbécil. Él de fiesta y yo en casa malina. No debe ser para tanto cuando no ha dado señales de vida, claro, que yo tampoco...

Seguiré comiéndome las uñas, a ver si llegan los besos...


---- Añadido posterior: pasaron menos de dos horas de este post y él ya me estaba dando un toque. Después un mensaje... Vamos, que ya estoy tranquila y contenta, aunque me quedara sin beso. Quizá vaya este finde a verle, tengo la sensación de que vale la pena arriesgar. -----


---- Segundo añadido posterior: Hoy le mandé un mens diciéndole que si quería que me acercara a pasar el día mañana con él. Su respuesta de: "Estoy muy bien contigo pero creo que tengo que pensar, dame tiempo" me ha sorprendido, sobre todo porque no fui yo quien empezó a hacer planes y quien quiso que "eso" pasara de los dos días que estuvimos juntos. Debe ser mi sino cruzarme con gente que piensa que el mejor camino es echar a correr en dirección contraria. A pesar de todo todavía estoy esperando que me dé un toque esta noche; quizá porque soy imbécil (bastante probable) quizá porque creo (maldición de las mías) que va a estar comiéndose los huevos hoy y pensando en mi (orgullo a parte, pero vi cómo me miraba...) En el fondo y la conclusión es la de siempre: Cagao pa mi! ----

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